ISRAEL SE PREPARA PARA INTERCEPTAR FLOTILLA DE AYUDA RUMBO A GAZA

El plan israelí contempla detener a los activistas y trasladarlos a la prisión de Ketziot, en el desierto del Néguev, desde donde serían deportados. Quienes se nieguen a la expulsión quedarían bajo custodia del Ministerio del Interior, dirigido por el ultraderechista Itamar Ben Gvir. Además, algunas embarcaciones podrían ser remolcadas a la costa israelí, mientras que otras serían hundidas en el Mediterráneo.
Pese a los llamados internacionales para evitar un enfrentamiento, Israel sostiene que la flotilla tiene vínculos con Hamás, aunque no ha presentado pruebas concluyentes. Tanto el Gobierno israelí como el de Italia han pedido a los activistas detener su marcha y entregar la ayuda humanitaria en puertos alternativos, con el fin de garantizar que llegue a Gaza sin romper el bloqueo. La situación aumenta la tensión en medio de los intentos de Estados Unidos e Israel por alcanzar un acuerdo que ponga fin al conflicto con el grupo islamista.