Hasta este sábado la Empresa Pública Municipal de Transporte de Santo Domingo debe retirar los dispositivos como fotorrojos, fotorradares, contadores, entre otros, colocados en el tramo KFC – Sueño de Bolívar, de la vía Alóag- Santo Domingo en los bienes del GAD provincial, como lo solicitó la prefecta Johana Núñez el pasado jueves 26 de septiembre. El lunes enviaron de manera formal el pedido. El mismo día el alcalde del cantón, Wilson Erazo, rechazó esta acción señalando que los funcionarios desconocen la Ley, situación que respaldó el jefe de los agentes de tránsito, Javier Murillo.

El pasado viernes 27 de septiembre, el gerente de la Empresa Pública Municipal de Transporte, Héctor Fiallo, mencionó que no retirarán estos dispositivos de control de tránsito al menos que se lo ordene el Ministerio de Transporte y Obras Públicas, porque mantienen un convenio interinstitucional. Señaló que de intentar retirarlos, los demandarían por daños al bien público.

En este nuevo conflicto entre las dos principales autoridades de la localidad, los conductores se convierten en espectadores y piden menos sanciones.

El burgomaestre señaló que estos dispositivos han ayudado a reducir en un 80% la mortalidad por los accidentes de tránsito, y que el Gobierno Provincial tiene la delegación de la vía, es decir, la calzada para su ampliación y no el tránsito como tal. La prefectura no ha mencionado si acudirá a otras entidades del Estado como la Procuraduría para que se aclare hasta dónde llegan sus competencias y se ponga fin a esta nueva polémica.