Durante casi 8 años, los habitantes de Alluriquín han pedido la construcción de un muro de gaviones en los laterales del río Damas. Sin embargo, las autoridades no han atendido sus peticiones. Ellos temen inundarse, pues las lluvias han retornado con gran fuerza en la parroquia, mencionó Gustavo Campaña, quien perdió su casa en abril de 2016 cuando el afluente se desbordó.

Nancy Velásquez, habitante de la parroquia, recuerda claramente el sufrimiento que vivieron durante las inundaciones. Ella exige que las autoridades realicen el muro como les prometieron en campaña,  pues no pueden dormir en paz en la noche por el miedo a inundarse.

Alluriquín tiene aprobado un plan de contingencia ante las emergencias por las lluvias, los habitantes consideran que debería aplicarse, pues es preferible prevenir antes de que ocurra algún desastre, por ello han realizado la limpieza de las alcantarillas. 

El impacto del agua sobre las rocas es un sonido que sigue atormentando a los habitantes de Alluriquín, pues es la advertencia de la naturaleza para que abandonen sus casas cuando el río crece. Ellos prefieren que el limitado presupuesto que tiene el GAD Parroquial sea invertido en obras de contingencia.