Cada vez que llueve, el río Blanco se convierte en un peligro para quienes cruzan a diario en lanchas por la vía Calacalí – La Independencia. El afluente crece y trasladarse de un punto a otro es complicado, cuando eso sucede el servicio se suspende. Situación que afecta a quienes todos los días sacan sus productos. No pueden ir por vías alternas como la de Flor del Valle, pues la inseguridad acecha en estos accesos, por lo cual prefieren arriesgarse a cruzar el caudal hasta que el puente sea colocado.

Carlos Aldana, responsable del proyecto, manifestó que han existido problemas con los trabajos por las constantes lluvias. Sin embargo, estos inconvenientes han sido subsanados extendiendo los horarios de labores. Actualmente, se construyen las bases del puente y se espera que la próxima semana se realice el preensamblado de la estructura.

Para evitar el ingreso de las personas y que estas interrumpan los trabajos, cerraron un tramo del acceso, lo que implica que deben caminar un largo trayecto para abordar las lanchas.

Los ciudadanos temen quedar completamente incomunicados con la llegada del Fenómeno de El Niño. El viaducto fue arrastrado por el Río Blanco el 18 de marzo de este año, ya han pasado casi 8 meses de lo ocurrido y aún no hay una fecha exacta de cuándo estará listo el puente Delta, a algunos les han informado que sería en enero de 2024.