El consorcio de transporte urbano MÍO en Santo Domingo ha anunciado que el 10% de su flota vehicular contará con elevadores automáticos para facilitar el embarque y desembarque de personas con diferentes tipos de discapacidad. El proceso de instalación de estos dispositivos en los buses seleccionados comenzó el lunes 29 de mayo y se espera que se complete lo más rápido posible, brindando así mayores facilidades a los usuarios con problemas de movilidad.

Iván Pallarozo, presidente del organismo, destacó que estas adaptaciones se realizan en cumplimiento de la nueva Ley de Tránsito y las resoluciones de la empresa pública municipal de Tránsito. Además, Pallarozo expresó su satisfacción por poder brindar apoyo a las personas en situación de vulnerabilidad, señalando que ahora los ciudadanos que utilizan sillas de ruedas podrán acceder a los buses en cualquier ruta.

En los próximos días se llevará a cabo una encuesta para determinar las rutas que requieren mayor número de buses inclusivos y se establecerán los horarios correspondientes. Los transportistas han invertido alrededor de 300 mil dólares para adaptar elevadores eléctricos y portabicicletas en la flota de buses urbanos.

Federico Mora, una persona con discapacidad que ha cuestionado la falta de inclusión en Santo Domingo, expresó su satisfacción al conocer que contarán con facilidades para movilizarse en unidades de servicio público. Además, hizo un llamado para que las autoridades también se sumen a esta iniciativa y se trabaje de manera articulada, ya que la inclusión va más allá de los buses.