El Gobierno federal de EE.UU. continúa cerrado por segundo día, debido a la falta de acuerdo entre republicanos y demócratas sobre el presupuesto, principalmente en torno a los subsidios ampliados del

El Senado entró en receso por Yom Kipur, lo que retrasa cualquier votación hasta mañana y aumenta la incertidumbre sobre la duración del cierre.

Los más afectados son los trabajadores federales, quienes, según la Casa Blanca, enfrentan despidos inminentes. Aunque las agencias esenciales se mantienen operativas, varias actividades y programas ya evidencian los efectos directos del estancamiento político.