Este viernes 22 de agosto, diez puertas fueron derribadas en el barrio Zaracay durante un operativo del bloque de seguridad integrado por la Policía Nacional, Fuerzas Armadas, Agentes de Control Territorial, Tránsito y Control Municipal. La intervención se ejecutó con maquinaria pesada y buscó eliminar obstáculos que limitaban el ingreso de uniformados a este sector considerado como zona roja de Santo Domingo.

El intendente de Policía, Diego Peñaherrera, explicó que las estructuras dificultaban el desarrollo de operativos, por lo que se procedió a su retiro con el fin de reducir la resistencia de los habitantes y garantizar un mayor control en la zona.

De manera paralela, en el sector 15 de Septiembre, las autoridades realizaron una incursión en una gallera clandestina, tras denuncias ciudadanas. Allí se efectuó la revisión de las instalaciones.

El bloque de seguridad informó que este tipo de acciones continuarán intensificándose en los sectores más conflictivos de la ciudad, con el objetivo de reforzar la seguridad ciudadana.