Los 9700 conductores que conforman la cámara de Transportistas de Carga Pesada de Santo Domingo de los Tsáchilas se oponen a que se apruebe el proyecto de Ordenanza que pretende regular el peso de carga de esta modalidad de transporte en las vías estatales y rurales de Santo Domingo de los Tsáchilas, expresó Mauricio Benavides, dirigente de este gremio, quien recalcó que el Ministerio de Transporte y Obras Públicas ya fijó el peso máximo con el que pueden circular los automotores, el cual corresponde a 3.5 toneladas. 

En 15 días se conocerá si el proyecto será aprobado o no por la Cámara Legislativa del Gad Provincial. William López, asesor legal de la Prefectura, indicó que están a punto de culminar la socialización con los dirigentes de este gremio en la provincia y que la semana entrante lo harán con los que representan a este sector a escala nacional; una vez finalizado el diálogo pondrán el proyecto a votación. 

Benavides considera que esta ordenanza a más de ser sancionatoria representa para ellos un impuesto más, ya que el peso lo dispone, en muchas ocasiones, el generador de la carga y también cree que las autoridades no evaluaron las dificultades y necesidades que tiene este sector, pues consideran que las carreteras no están en óptimas condiciones.   

A lo que López alegó que no se trata de una impuesto, sino una medida de reducción de costos que han planteado por los múltiples gastos que les implica arreglar las vías, pues consideran que el transporte pesado sería quienes más desgastan la carpeta asfáltica. 

Los dirigentes del transporte pesado de la provincia elaboraron un informe técnico sobre la propuesta de ordenanza que se pretende instaurar, con la finalidad de analizarlo esta semana  con la Prefecta de la provincia, pero se les notificó que la autoridad se encuentra fuera del país y retornará en 8 días, lo cual representa más de la mitad del tiempo para que la ordenanza sea aprobada.