La derogatoria de la tabla de drogas realizada vía decreto ejecutivo la semana pasada por el presidente Daniel Noboa, abrió el debate sobre si se trata o no de una medida constitucional. Esta resolución establecía los gramos máximos que podía portar un consumidor. Marihuana, hasta 10 gramos, Pasta Base de Cocaína 2, Clorhidrato de Cocaína 1 gramo, heroína 0,1 gramos y anfetaminas 0,040. Kléber Carrión abogado experto en temas de seguridad expone que la vigencia de esta tabla incrementó el microtráfico en el país, por lo que desvió su objetivo. Ahora, esta derogatoria, dependerá de las diferentes acciones que se implementen desde el gobierno para ejecutar los controles en territorio, tanto desde la policía nacional como desde el Ministerio de Salud, en acciones preventivas.z

Mientras que Miguel Orellana, coronel en servicio pasivo de las Fuerzas Armadas, destaca que esto deja un vacío legal que debe ser llenado urgentemente desde la Asamblea, con una normativa que permita a un juez determinar los casos que serán tratados como consumidores y como traficantes de drogas. En tal virtud, el presidente de la Corte Nacional de Justicia, afirma que es urgente una mesa de trabajo con los representantes del gobierno para definir una ruta. Mientras tanto, el Ministro de Salud, Franklin Encalada, señala que se busca priorizar el eje preventivo sobre el curativo. Además, sostiene que esa cartera de Estado solicitará recursos para cumplir con la disposición.

Tal reglamento fue emitido en 2013 durante el gobierno de Rafael Correa, con la finalidad de diferenciar a los consumidores de los traficantes de droga. Para otros expertos, es inconstitucional la derogatoria vía decreto, pues se contrapone al artículo 364 de la Constitución que establece que las adicciones son un problema de salud pública y que los consumidores no deben ser criminalizados.