La mayoría de artesanos de la parroquia San Jacinto del Búa realizan sus actividades laborales de manera empírica, por ello, ven necesario obtener una certificación que los valide como profesionales. Sin embargo, consideran que obtener el documento es muy costoso y realizan actividades para recaudar fondos y costear los gastos. Así lo dio a conocer Marcial Zambrano, presidente de este gremio.

Muchos de los empleadores que contratan los servicios de los artesanos están obligados a llevar contabilidad y requieren factura, por esta razón los emprendedores pierden oportunidades laborales.

En la parroquia, hay pocos centros de capacitación, los que existen son costosos, y por ese motivo se ven obligados a venir hasta Santo Domingo para instruirse en la rama que ejercen diariamente.

Corte y confección, bordado, belleza, floristería, albañilería, carpintería en bambú y otras actividades más ejercen los 50 artesanos de San Jacinto del Búa, quienes buscan recaudar los fondos necesarios para obtener sus certificaciones.