Tras 28 meses de trabajos, la prefectura de Santo Domingo de los Tsáchilas dará por finalizada dentro de 5 semanas la ampliación del tramo KFC – Sueño de Bolívar. Dentro de esta obra hubo 2 prórrogas y 2 suspensiones que casi completaron 18 meses de pausas y complicaron los trabajos. Un proyecto que hace un par de días terminó su proceso de fraguado y llegó a costar 9 millones 756 mil dólares. Ahora solo falta el ingreso y salida del puente y la colocación de señaléticas, informó Esteban Naranjo, gerente de la EPCO Tsáchila.

Hasta que esto suceda los conductores siguen corriendo peligro, como en este vídeo que captó nuestra cámara donde un auto casi  choca con una camioneta al intentar cruzar sin fijarse, pues esta persona no conocía por dónde trasladarse ante la escasa señalética del lugar.

A estos problemas se suma que los buses del lugar no tienen una parada determinada para dejar a los estudiantes. Varios de ellos, en especial niños pequeños, corren el riesgo de ser arrollados.

Quienes transitan por la parte baja del puente, reclaman que no ha existido intervención por parte del Ministerio de Transporte y Obras Públicas en la vía, por ello los carros caen constantemente en los baches y al detener su marcha son asaltados.

 Respecto a esto, Naranjo enfatizó que existe buena relación con el Ministerio de Transporte y se llegará a un acuerdo para determinar cuáles fueron las causas del daño en la vía. Si está resultó con perjuicios a causa de la ampliación del puente la prefectura de Santo Domingo de los Tsáchilas esta se hará cargo del arreglo. Se intentó buscar una versión del Ministerio de Transporte y Obras Públicas, pero no obtuvimos respuesta.