El anuncio del presidente de la República Guillermo Lasso sobre la implementación de la muerte cruzada adoptada en las últimas horas, provocó incertidumbre en las calles del país. Aunque existen opiniones divergentes sobre esta medida.

Por un lado, hay quienes consideran que la decisión tomada por el Presidente es lo mejor para el país, dado los altos niveles de inseguridad que se han registrado en los últimos tiempos. Argumentan que la aplicación de la muerte cruzada podría ser una herramienta efectiva para combatir la delincuencia.

Por otro lado, existe un sector de la población que sospecha que esta medida tomada por el ejecutivo es una estrategia para deslindarse del juicio político en su contra por supuesto peculado. Consideran que el anuncio de la muerte cruzada puede ser una forma de distraer la atención pública y desviar el foco de atención de los problemas políticos que enfrenta el presidente. Expresaron su preocupación por la utilización de esta medida como un recurso para evadir responsabilidades legales y políticas.

No obstante, en lo que la mayoría de la población coincide es en que la situación del país debe mejorar por el bienestar de todos. Independientemente de las opiniones divididas sobre la muerte cruzada, existe un consenso generalizado en la necesidad de mejorar en aspectos como la seguridad, la economía y el bienestar social. Los ciudadanos esperan que las decisiones tomadas por el presidente y las instituciones gubernamentales se enfoquen en abordar estos desafíos de manera efectiva.