A menos de 24 horas de un posible cierre del Gobierno, republicanos y demócratas mantienen un fuerte estancamiento en el Senado. El conflicto gira en torno a la exigencia demócrata de extender subsidios del Obamacare como condición para aprobar la financiación gubernamental, lo que ha bloqueado los intentos republicanos de aprobar un plan sin modificaciones. Una reunión en la Casa Blanca con el presidente Donald Trump y líderes del Congreso no logró avances, aumentando el riesgo de que se produzca el primer cierre de su segunda administración.

Los republicanos, encabezados por el líder de la mayoría del Senado, John Thune, buscan presionar al demócrata Chuck Schumer para que apruebe el proyecto sin condiciones, mientras lo acusan de utilizar el presupuesto como rehén político. Aunque algunos senadores republicanos, como Josh Hawley, reconocen la necesidad de discutir los subsidios de salud, consideran que no deben vincularse a la continuidad del Gobierno. Por su parte, Schumer sostiene que el desenlace depende de Trump y que los subsidios son esenciales para garantizar el acceso a la atención médica.

Con el tiempo en contra, las perspectivas de un acuerdo son mínimas. Mientras demócratas como Peter Welch insisten en que sin compromisos en salud no habrá avances, republicanos aseguran que los votantes responsabilizan a la oposición por un eventual cierre. Entre la incertidumbre, voces como la del senador John Fetterman advierten que millones de ciudadanos sufrirán las consecuencias, desde despidos hasta la paralización de servicios clave, lo que podría tener un fuerte impacto tanto dentro como fuera del país.