Tanques israelíes ingresaron a varios barrios de la Ciudad de Gaza en las últimas 24 horas, intensificando los enfrentamientos en uno de los centros urbanos más poblados del enclave palestino. Imágenes verificadas muestran blindados avanzando hacia el campamento de la playa y en las inmediaciones de la Universidad Islámica, lo que confirma que las fuerzas israelíes han penetrado profundamente en la ciudad desde el inicio del asalto terrestre el domingo. Mientras tanto, la población civil enfrenta las consecuencias: a inicios de mes vivían allí alrededor de un millón de personas, de las cuales Israel asegura que 640.000 ya han huido, aunque la cifra no ha podido ser confirmada de manera independiente. La ofensiva militar se desarrolla en medio de escenas de destrucción y temor. Según reportes, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) derriban edificios sospechosos de ser utilizados por Hamas para emboscadas y almacenamiento de armas, mientras drones y helicópteros sobrevuelan de manera constante. La violencia ya cobró la vida de un oficial israelí, el mayor Shahar Netanel Bozaglo, de 27 años, alcanzado por un ataque con RPG. Para quienes permanecen en la ciudad, los bombardeos se sienten como “terremotos literales”, relató un portavoz de la Municipalidad de Gaza.