La Unión Nacional de Educadores (UNE) encabezó una movilización en Santo Domingo para rechazar la crítica situación que atraviesa el país en sectores clave como salud pública, educación, trabajo y seguridad. La concentración se realizó frente a la Gobernación y reunió a distintos actores sociales que, según Milton Bustillos, dirigente de Unidad Popular, salieron a exigir el respeto a los derechos del pueblo.

A la jornada de protesta se sumaron los pacientes de la dializadora Socihemod, quienes exigieron el pago de más de 10 millones de dólares que les adeudan el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), el Seguro Campesino y el Ministerio de Salud Pública (MSP). Jenny Acosta, vocera de los dializados, informó que hasta el 15 de agosto los derivados del MSP serán atendidos, pero después podrían quedar sin tratamiento por la falta de recursos.

El sector educativo también mostró su descontento. Mélida Paucar, presidenta provincial de la UNE, expresó su indignación por el despido de al menos seis docentes en Santo Domingo de los Tsáchilas, quienes forman parte de los 5.000 desvinculados a nivel nacional en semanas recientes.

Los participantes aseguraron que esta fue una movilización nacional y que no será la última. Anunciaron que continuarán organizando protestas hasta que el Gobierno atienda sus demandas.