El Centro de Control de Armas de Santo Domingo de los Tsáchilas registra un incremento del 30 % en las solicitudes para porte y tenencia de armas durante los dos últimos meses. Según informó Stalin Guerrero, coordinador del centro, en lo que va del año 2025 se han entregado alrededor de 300 permisos, siendo mayor la demanda para el porte de armas. El tipo de armamento solicitado incluye tanto armas no letales como letales, entre estas últimas las más comunes son las pistolas 9 milímetros y las escopetas. Los solicitantes deben cumplir con los 11 pasos establecidos en el Acuerdo Ministerial 145, que regula el proceso de autorización para la tenencia y porte.

Uno de los pasos finales consiste en la prueba del arma. El postulante debe llevar el arma con la documentación respectiva y tres balas para la evaluación, indicó Roberto Muñoz, analista de tiro del Centro. Este procedimiento se realiza con el Despejador Balístico, instrumento que permite verificar el funcionamiento del equipo. A diario se prueban alrededor de 40 armas.

La mayoría de solicitantes son personas naturales, entre ellos agricultores, ganaderos, policías en servicio pasivo y guardias de seguridad. Sin embargo, el factor común entre ellos es el mismo: la creciente inseguridad en la provincia. La preocupación por extorsiones, secuestros y asesinatos ha impulsado a muchos ciudadanos a buscar medidas de protección.

El proceso para obtener los permisos tiene una duración aproximada de dos meses. Usuarios consultados en el lugar coincidieron en que, a pesar de los requisitos, ahora es más sencillo acceder al permiso, especialmente si se cumple con la documentación exigida.