Las unidades de buses urbanos de Santo Domingo suelen acostumbrar a no recoger a los estudiantes que toman estos colectivos. A nuestra redacción llegó una denuncia en que exponen al bus número 85, de la línea Ejecuttrans, que pese a estar vacío, el conductor no quiso abrir la puerta a los estudiantes del colegio Calazacón. Según el presidente de esta compañía, George García, esto se da porque los choferes van contra el tiempo o porque pelean a los pasajeros de tarifa completa.

García aseguró que alrededor de 200 procesos administrativos sancionatorios se aplican al año. Las multas económicas son de un 20% del salario básico y se suspende a la unidad entre 24 a 72 horas.

Los estudiantes del colegio Calazacón afirman que las acciones de los conductores de no llevar a los alumnos se dan con frecuencia. Rechazan este tipo de discriminación hacia este grupo que representa cerca del 20% de los usuarios de buses urbanos de Santo Domingo.

En este sector los estudiantes enfrentan otros problemas. Deben arriesgar sus vidas para pasar la vía Quevedo que es altamente transitada por los vehículos pesados. A Sixto Valencia le ha tocado meterse entre los carros para ayudar.

Según el dirigente de la transportación urbana, el sistema SIR y SAE promete poner fin a esta situación que se presenta desde hace varios años no solo con estudiantes, sino también con los grupos vulnerables como los adultos mayores.