Con la finalidad de recuperar los espacios públicos, la dirección municipal de Control Territorial de Santo Domingo colocó vallas y desplegó un contingente de 25 uniformados en la calle Ambato para evitar que el comercio informal se instale en el lugar. Andrés Montero, responsable de esta área, dio a conocer que estas acciones forman parte de un plan piloto para tratar de dar cumplimiento a la ordenanza 040 y la de discapacidades.

Los comerciantes formales de este sector consideran que esta medida debería ser definitiva. Califican como competencia desleal la actividad que realizan los vendedores informales porque no pagan un arriendo e impuestos.

Por su parte, los comerciantes informales dicen que estas medidas vulneran su derecho al trabajo, ya que no todos causan el desorden en la vía pública.

No obstante, la ciudadanía acota que cuando los comerciantes se encuentran en el lugar obstruyen la vía e impiden que los automóviles se movilicen con normalidad.